La directiva del centro de padres de la escuela Dellamira Rebeca Aguilar de Barranco Amarillo sostuvo una reunión con la gobernadora de Magallanes, Paola Fernández y con el seremi de Obras Públicas, Ricardo Haro, a quienes les plantearon su preocupación por la seguridad vial del sector.
Esto porque los vehículos que transitan por el lugar, en muchos casos, lo hacen a gran velocidad, lo que se transforma en un riesgo constante para los alumnos que asisten al establecimiento, sobre todo, en las horas de entrada y salida.
En ese sentido, la gobernadora Fernández, corroboró que no sólo basta con las barreras amarillas que hay en el sector de la escuela, sino que también se hace necesario contar con más infraestructura vial para la seguridad de los niños, profesores y sus padres, debido a que el recinto educacional se encuentra ubicado en una curva.
“Los conductores que van en dirección norte se encuentran con las personas cruzando la calle prácticamente de manera sorpresiva, porque el camino tiene una subida justo antes de llegar a la escuela, en tanto, quienes van hacia Punta Arenas se encuentran en la curva con el paso donde cruzan los peatones, entonces de verdad es un tema complejo, que representa un peligro constante y nos preocupa”, comentó la autoridad provincial.
En relación al tema, el seremi de Obras Públicas, Ricardo Haro, manifestó que la demanda por mayor seguridad en el sector de la escuela se arrastra por varios años, por lo que asumió el compromiso de ejecutar un proyecto de seguridad vial en el establecimiento que pasa por una ruta que está bajo la tuición de Vialidad.
“Son dos las escuelas en la región que se encuentran en esta condición, la de Dorotea y Barranco Amarillo, donde no se puede colocar un “lomo de toro” por la velocidad permitida para el tránsito de los vehículos en estas rutas. Sin embargo, dentro de los próximos días llegará a la zona un especialista de la dirección de Vialidad  para evaluar el tema y así preparar el diseño más adecuado para el proyecto”, dijo Haro.
Una de las alternativas es la utilización de balizas peatonales que advierten a los conductores la aproximación a zona de escuelas, además de la demarcación e instalación de letreros antes de llegar al establecimiento, que adviertan a los automovilistas sobre la circulación de escolares y peatones por el sector.
La presidenta del centro de padres de la escuela, Maribel Mancilla, agradeció el compromiso de las autoridades por querer dar una solución definitiva a este problema que pone en riesgo a los peatones.
“Los niños son traviesos, salen corriendo o jugando y no queremos que sean víctimas de un atropello. Ojalá tengamos una pronta respuesta con señalética, focos luminarios y todo lo que sirva para resguardar la seguridad de nuestros niños, sus profesores y de nosotros mismos, los apoderados. Entendemos que no es un tema sencillo, pero esperamos que la solución se concrete en el menor tiempo posible”, sostuvo Mancilla.